19/10/2013

De vuelta al Mar de Baffin


Salida  de Ilulissat, bahia de Disko, Groenlandia. F.Aurat/Tara Expéditions
Este sábado por la tarde estamos dejando el bonito puerto de Ilulissat tras cuatro días de escala. Somos catorce a bordo, con un relevo de cinco recién llegados. Nuestro programa científico es de realizar cuatro estaciones científicas de aquí a Quebec, en el Mar de Baffin y el Mar de Labrador.

Después de cuatro días de encuentros, almuerzos en tierra, caminatas alrededor del glaciar y del “icefjord” de Ilulissat, regresamos al mar con una energía renovada y la mente llena de imágenes y recuerdos.

Esta mañana, antes de zarpar, nos hemos topado con Nils. Este inuit estaba alistando su equipo de perros de trineo. Excitados por los preparativos del viaje, impacientes por correr en la nieve, los perros ladran mientras el musher, su conductor, les pone sus arneses. Al observar Nils por media hora, uno puede imaginar estar hojeando una novela de Jack London. Finalmente, Nils arranca y toma casi vuelo. En pocos segundos, el trineo es solo un punto negro en la loma cubierta de nieve. Arriba, unos turistas lo están esperando para un paseo. Nuestra caminata por el glaciar es también un momento grandioso, aun cuando se nota su retroceso desde 1989 a causa del calentamiento global.

Al salir del puerto bañado por los rayos rasantes, nos toca otro momento de ensueño, especialmente para los amantes de fotografía. En una luz de oro, en medio de miles de pequeños icebergs, Tara iza sus velas. Junto a François Aurat estoy en uno de nuestros zodiac para captar estos nuevos momentos de gracia. Llevada por su mayor y mesana, la goleta se desliza entre los cubos de hielo de múltiples formas, a veces azules, a veces grises.

Esta noche, marineros de turno aparte, cada quien esta calentándose cómodamente en su camarote. Tara deriva sin velas, una primera estación de muestreo de superficie en la bahía de Disko está programada para mañana por la mañana con temperaturas algo frías.

Vincent Hilaire