02/02/2011

Rotaciones en Puerto Williams


© Françis Latreille / Fonds Tara
2 febrero 2011
Desde hace tres días, se están cruzando los miembros del equipo que dejan Tara, y los que llegan.
Antes de ayer, desembarcaron Roland Heilig y Thomas Lefort, dos biólogos franceses de la campaña en la Antártida.
Ayer, apareció Hélène Santener, veterana de Tara y nuestra nueva cocinera, junto al fotógrafo Francis Latreille y el médico de las expediciones Tara, Thierry Mansir. Bernard d'Alessandri, secretario general del Yacht Club de Mónaco, es también otro elemento de este lote.
Esta mañana, nuevo movimiento de una nueva serie: la salida de Mike Lunn, oficial de cubierta embarcado en  Río, y también la de François Noël, jefe mecánico también embarcado en Brasil. El abandonaba así su compadre Alain Giese, segundo capitán y amigo de 30 años. Por último, a este tándem se junto un científico, Edouard Leymarie, del Laboratorio de Villefranche. El inflable rebosaba de bolsas más grandes unas que otras.
Amélie Betus y su hijo Naël Bourmaud a su vez dejaban Tara unos minutos más tarde. Amélie fue quien se hizo cargo de las comidas de la tripulación desde la escala de Buenos Aires. Y con sus ocho años apenas, Naël ha descubierto la Antártida, después del Ártico.
Al final de la mañana, se nos unieron los dos codirectores de la expedición Tara Océans, Eric Karsenti y Etienne Bourgois, el también propietario de Tara. Otro científico especialista en imágenes, Christian Sardet, y un periodista de la Agencia France Presse, Patrick Filleux, se agregaron igualmente. Por lo tanto, estaremos unos quince a bordo durante un par de semanas hasta nuestra próxima escala en Puerto Montt, siempre en Chile. Enrumbaremos después hacia Valparaíso.
En el menú, la travesía de los canales de Patagonia. Esta mañana, el tiempo es muy tranquilo, el mar apenas ondulado, el sol suave y cálido. Las previsiones sugieren la persistencia de estas benévolas condiciones en los próximos días.
Saldremos mañana temprano de Puerto Williams. Por ahora, todavía no se ha reparado el  generador eléctrico que alimenta el cabrestante. La inmersión de la roseta será entonces imposible hasta nuevo aviso. Pero Eric Karsenti me decía que, considerando el número de estudios ya realizados en los canales de Patagonia, una estación, aunque en versión reducida, no dejara de tener interés, complementando de todos modos el banco de muestras de Tara Océans.
¡Ya arrancan nuevas aventuras!