Salida deTuktoyaktuk. V.Hilaire/Tara Expéditions |
Acabamos de dejar el encantador pueblo de Tuktoyaktuk,
"Tuk", Canadá, y sus calurosos habitantes, Inuit en su mayoría. Esta
mañana, la realidad nos despierta brutalmente, confrontados al reto de Tara
Oceans Polar Círcle. Los nuevos mapas de hielo recibidos el sábado por la noche
no son buenas noticias para nuestra navegación. Las caras de Loïc Vallette y
Lars Stemmann, jefe científico de esta nueva etapa Tuk - Arctic Bay, Canadá, hablan volúmenes. Pero La
hemos pasado peor antes. Como siempre a bordo de Tara, el optimismo prevalece.
Un hermoso sol matutino
y casi 5° C: este sábado empieza bien. Todo el mundo ha descansado y los que
estaban de guardia la noche anterior amanecen suavemente. Seguramente, es algo más
laborioso para aquellos que todavía acusan un pequeña "jet-lag", después
de cuarenta horas de vuelo para llegar a Tuk.
Anoche, después
de levantar ancla, Tara se ha dirigido hacia el Norte, y luego hacia el Este. Ahora
estamos casi en la entrada del Golfo de Amundsen, el legendario Paso del
Noroeste que el explorador noruego fue el primero en cruzar por mar entre 1903
y 1906.
Tara tiene solamente
siete cortos meses para completar su vuelta del Ártico.
Es un momento
clave: entramos en el segundo paso de la circunnavegación ártica, un reto que
resulta ser cada día más complejo, ya que este año el derretimiento del hielo
no batirá récords. Pero quien no arriesga no gana. Los apasionados del Ártico
han aprendido, a sus expensas a veces, que
cada paso es una lección de humildad.
Estamos en el “wait
and see” que es la marca de toda expedición polar: no sabemos con qué sazón nos
acomodará el Ártico para tragarnos en dos o tres días. En el briefing matutino,
Loïc lo plantea bien claro: "Nos dirigimos lo más rápidamente posible
hacia el Bellot Strait sin hacer una estación científica. Es nuestra única
oportunidad de llegar a Groenlandia” Y Lars de agregar: "...Guardando la
posibilidad de dar marcha atrás".
El estrecho natural
Bellot es digno de interés por si mismo: por 71° 59' Norte, el ofrece un paso entre la península
de Boothia y la isla de Somerset en el archipiélago ártico canadiense que forma
una gran parte del Paso del Noroeste. 35 km de largo, apenas uno o dos
kilómetros de ancho en ciertos lugares. Las orillas del estrecho, que lleva el
nombre del oficial de marina francés Joseph René Bellot, son abruptas y se
elevan a 450 metros al norte y 750 metros al sur.
Bellot Srait se
parece a un gran canal de Corinto natural, pero hay un problema. Este año, a
diferencia del año pasado, ya está parcialmente sembrado de placas de hielo
joven, con corrientes de ocho nudos según las mareas. El es hasta ahora nuestra
única salida del dédalo del Noroeste. Además, a partir de mediados de
septiembre, la tendencia es de un regreso del frío. Después del Cabo
Cheliuskin, Rusia, el Bellot Strait es como el segundo paso a nivel de nuestra expedición.
Vincent Hilaire