Medusas, profundidad 80m, Mar de Beaufort. F.Aurat/Tara Expeditions |
Emmanuel Boss nos
transmite la buena noticia con una franca alegría: "Podemos muestrear en
aguas americanas ya que comprobaron que nuestra actividad no genera beneficio
económico". Hace días que él está esperando esta autorización de los
Estados Unidos para saber si podemos muestrear la zona comprendida entre las 12
y las 200 millas de la costa de Alaska.
Tara hace ruta al
Este. Ayer cumplimos con la cuarta estación larga de la expedición, en el
hielo, bajo la mirada distante de algunas morsas lascivas. Aprovechando un sol generoso
que descongela poco a poco la cubierta de Tara, los científicos han muestreado
por última vez el Mar de Chukchi en dos profundidades, en superficie y en la
DCM a 40 metros, siempre en el borde del hielo.
Las primeras
muestras revelan una vida planctónica abundante, con numerosas algas. Unas Nichtia,
diatomeas largas y delgadas, llenan las
redes, al igual que los bien nombrados Ángeles de mar que flotan con gracia en el cielo líquido de este
helado Océano Ártico.
Nuestro próximo
objetivo científico es de muestrear las aguas del Mar de Beaufort y, por qué no,
las del Barrow Canyon, cerca de la Punta Barrow. Las capas profundas de este
mar "pequeño" de 450.000 km2 proceden del Atlántico Norte; Por ello son
de especial interés para nuestros científicos en tierra. Tenemos previsto realizar
esta nueva estación en 48 horas.
Al entrar en el
Mar de Beaufort, estamos acercándonos al Paso del Noroeste, ya que da al este
del golfo de Amundsen, la puerta de entrada oeste del laberinto.
Vincent Hilaire