10/08/2017

Rumbo a Sidney



Acabamos de zarpar hacia el segundo año de la expedición Tara Pacific, dedicada al estudio de los corales. Los científicos apuntan ahora a las dos estructuras más grandes construidas por este animal en el planeta, en Australia y Nueva Caledonia.

Después de un día de lluvia a cantaros, el sol sale dos horas antes de nuestro zarpe. Nos ofrece un fin de tarde excepcional. Los paisajes de Whangarei se visten de los colores de nuestra Suiza normanda y de Limousin.
Simon, nuestro capitán, apenas librado de la clearance y de las aduanas kiwi,  le pide a Charlène Gicquel, jefe mecánico hasta Sidney, lanzar los dos motores. Simon no esconde su impaciencia por  aprovechar la mejoría y maniobrar para salir al río.
Samuel Audrain, capitán saliente, y Marion Lauters, chef saliente, prestan servicio de prácticos de muelle para soltar las amarras. Suavemente, Simon embraga en reversa. Con un último saludo de Marion y Samuel, Tara se enrumba al este.
Nos quedan unos 15 kilómetros, nocturnos esta vez, para salir de esta hermosa ría sinuosa y alcanzar el mar abierto. Dos horas más tarde, los primeros movimientos de balanceo avisan nuestra entrada en el Elemento. Como un dromedario en mar de arena, la goleta progresa en un movimiento “metronómico” hacia adelante, un paso muy castizo.
Navegaremos así con motor durante un día entero, antes de encontrar condiciones más musculosas. Los datos meteo anuncian vientos del este, de 30 nudos, por los días venideros.

Iniciamos nuestra navegación hacia Sídney, Australia, con viento en contra. Podría ser incómodo para los 10 a bordo que deberán “amarinarse”, o sea, acostumbrarse rápidamente. Para estabilizar la goleta y controlar su danza, los marineros izan la mayor y el trinquete.
En esta primera noche de navegación, nos acompaña una luna casi llena. Nos esperan en Sídney, 1,215 millas adelante, el 18 de agosto. Será la segunda vez que la goleta se presente en Darling Harbour. En marzo 1990, Jean-Louis Étienne culminaba allí su expedición «Transantarctica», con 6  exploradores a bordo.

Vincent Hilaire.