Atlántico. V.Hilaire/Tara Expeditions
Mientras estamos progresando con motores en un mar levemente formado, los científicos están preparando las estaciones científicas 152 y 153 que serán a priori las últimas de esta expedición. El propósito: escanear el océano en una situación meteorológica anticiclónica, y unas horas más tarde, en una situación de baja presión. Un enfoque que aún no se había llevado a cabo a bordo de la goleta. Eric Karsenti, codirector de Tara Oceans y jefe científico de esta etapa junto a Stephane Pesant, explica este enfoque y evoca el final cercano de esta gran aventura.
¿Cuál es el beneficio de este nuevo enfoque?
Hasta ahora hemos intentado caracterizar las zonas oceánicas, las regiones; Regiones animadas por giros, por corrientes particulares, por upwellings. Aquí, vamos intentar caracterizar lo que está sucediendo en el océano, los cambios que se producen, en función de la meteorología. Suponemos que una masa de agua dada puede revistar diferentes características antes o después del paso de una depresión. En un estado estacionario anticiclónico. Dependiendo de las condiciones del mar, haremos seis días de estaciones en dos rondas.
Eric, usted vuelve a embarcar quince días antes de la llegada. ¿Cómo está viendo en retrospectiva estos dos años y medio de expedición?
Lo que lo hemos conseguido es fascinante. Al inicio, se formulaban muchas preguntas ¿El barco será adecuado? ¿El equipo humano Tara estará a la altura? ¿Los científicos de diferentes disciplinas lograrán trabajar juntos? Hoy puedo decir que es un éxito. Personalmente, no me esperaba algo tan difícil, pero hemos logrado realizar exactamente lo que queríamos.
Hemos desarrollado un método, un protocolo, que está ahora validado. Esto generará millones de datos, e incluso podrá ser materia de enseñanzas posteriores a estudiantes de doctorado. Con esta expedición se ha constituido una base de datos, un momento T0. Queríamos comprender unas propiedades fundamentales, ahora tenemos la información de referencia.
¿Serán necesarias más expediciones para completar esta base, entonces?
Sí, es cierto que una vez hecho el análisis de estos datos, habrá de volver al trabajo de campo para observar los cambios o no. De lo contrario este trabajo seguiría siendo parcelario. Habrá de muestrear aun mas allá de esta gran vuelta al mundo. Sólo así entenderemos las propiedades fundamentales de los ecosistemas marinos en el largo plazo.
Dicen que tomará diez años explotar y analizar todos los datos de Tara Oceans ¿es correcto?
Sí, a partir del final de la expedición, produciremos casi cada año resultados y publicaciones. Ya estamos trabajando en los primeros. Pero realmente empezaremos a tener una visión global sobre el valor de estos datos en unos tres años. Según las muestras hay a veces muchos niveles de análisis: la biodiversidad de los ecosistemas, la biodiversidad de los genomas y la ecología de los sistemas. Es por eso que es tan tardado.
¿Usted está pensando en nuevas expediciones a bordo de Tara?
Sí, una nueva expedición está prevista el próximo año en el Norte, con una vuelta al Océano Ártico donde se tomarán muestras como en Tara Oceans. Luego, en seis años, se tendrá que regresar a ciertas áreas y llevar a cabo investigaciones mas afinadas en función de los resultados obtenidos durante los dos años y medio de la actual expedición.
¿La expedición Tara Oceans se asemeja al final a lo que usted había ideado y soñado al principio?
La idea que yo tenía al inicio de esta expedición tras las huellas de Darwin ha evolucionado, pero no ha cambiado por completo. Todo la parte de la expedición que hice entre Buenos Aires, Argentina, y Puerto Montt, Chile, es en realidad el viaje del Beagle y de Darwin y, para el resto, hemos surcado nuestra propia trayectoria, nuestra estela.
En el plano humano, es también lo que yo quería, una gran mezcla: marineros, científicos, periodistas y artistas. Hemos creado a bordo una nueva forma de trabajar más allá de las separaciones, los corporativismos. Etienne Bourgois, el codirector de Tara Oceans, tenía la misma idea. La única diferencia es que él quería comunicar sobre el medio ambiente a través de proyectos con resultados rápidos; Con Tara Oceans, eso es imposible. Nuestras respuestas serán más genéricas, más globales. No se puede comunicar de la misma manera, en el mismo tiempo.
Ya que estamos hablando de la comunicación, ¿uno de sus ejes principales en esta expedición era también mejorar las relaciones entre los científicos y el público en general?
Todo comenzó con la observación de que el público no está informado de lo que los científicos descubren. Sin embargo, es imperativo que el público sea científica, filosófica y políticamente conscientes para hacer las elecciones correctas. Con Tara Oceans, hemos intentado ser pedagogos, explicar lo que está en juego, los objetivos, la importancia de esta investigación, y del conocimiento en general.
La expedición termina, ¿pero usted seguirá trabajando en este sentido?
Quiero involucrarme más en ese frente, sí. Esta es una de las grandes enseñanzas de Tara Oceans para mí. Debemos ir más lejos en la educación. La cultura de la transmisión de la ciencia es un campo casi en barbecho. Voy a utilizar películas, libros, conferencias, programas de radio. Y me gustaría que la televisión haga mejor su trabajo, con menos desastres y más informaciones.
Entrevista realizada por Vincent Hilaire