Durante nuestra corta
semana en Antibes, al igual que en otras
escalas, la goleta se ha llenado: rotación de tripulación, miembros del equipo
parisino de Tara, científicos afinando los protocolos de muestreo, técnicos instalando
nuevos dispositivos de navegación o reparando el sistema de comunicación por satélite.
Cubierta y cámara invadidas, barullo incesante, visitas del público y de los
grupos escolares; Los marineros se turnan sin descanso para explicar la
historia del barco y las razones de nuestra expedición en el Mediterráneo.
En tierra, los
días están organizados con sumo detalle: visitas de escolares y grupos,
horarios de comida, llegada de autoridades y personalidades, recepciones con los
socios de la expedición, conferencias públicas, etc. Este cargado programa está
pre-escrito. Ello contrasta con la flexibilidad que nos impone el mar donde la
naturaleza y clima dictan nuestra agenda. El oleaje se hace más suave? Es una oportunidad para que los científicos muestreen
el plástico con la red de Manta en vez de almorzar. Si bien se planifican las
estaciones científicas con anterioridad, son las condiciones del mar que dan la
pauta.
Este cambio de
ritmo de vida abre también un espacio para que los once a bordo en esta etapa nos
conozcamos mejor. Reaparecen unos veteranos de las expediciones: Samuel
Audrain, el capitán; François Aurat, jefe de cubierta: Marion Lauters, la chef.
Otros son nuevos: Aloys Le Claquin, oriundo
de Bretaña, marinero confirmado con 15 años en el medio de la regata en alta
mar; Rodolphe Gaudin, jefe de maquinas; Thomas Leeuw, científico en Tara por
segunda vez: este investigador estadounidense especializado en el color del
agua complementará el muestreo hecho Stéphanie Petit, investigadora en ecología
microbiana en Villefranche-sur-mer, asistida por Juliette Maury, estudiante-pasante
en biología: Noé Sardet también está de regreso para rodar una película sobre
el plancton. Y el artista estadounidense Spencer Lowell arrastra por la
cubierta sus diferentes cámaras de película argéntica para capturar lo que
acontece.
La convivencia en
el mar se construye gradualmente antes de nuestra próxima escala, Cala Gonone, Cerdeña, prevista para finales de la próxima semana.
Yann Chavance